Didá, fundada por Neguinho do Samba en 1993, es el primer bloco afro compuesto exclusivamente por mujeres. Su formación, según cuenta Goli Guerreiro en A trama dos tambores (2000), es parte de un fenómeno más amplio por el que las mujeres empiezan a aparecer en la percusión bahiana tanto en las calles como en el mundo profesional a lo largo de toda la década de los 90. No obstante, su creación y posterior debut (Lavagem do Bonfim, enero de 1994), como era de esperar, no dejó indiferente a quienes lo vieron desatando más de un ataque directo a las percusionistas. En una sociedad en la que el lugar de las mujeres se asocia al ámbito privado y su función social a los cuidados en general, en la que estas no forman parte de la vida pública ni de la lucha antirracista de las calles, no es de extrañar que su aparición creara conflicto y diversidad de opiniones, en su primer momento.

El objetivo de Didá ha sido desde el comienzo el de mejorar la vida de las mujeres y de los niños a través de la música o/y del arte. Este poder transformador lo encontramos en su propio nombre, puesto que Didá significa en yoruba "el poder de la creación"; una creación que sobrepasa la tradicional relación de la mujer con la maternidad y su capacidad de engendrar vida para situarla en otros espacios hasta entonces negados, como el de la percusión. Su actitud dibuja un nuevo imaginario de las mujeres tanto musical como político: mujeres activas, fuertes y empoderadas a través de los mismos instrumentos que por entonces llevaban casi veinte años empoderando a la comunidad negra.

En los primeros años emprendieron una búsqueda identitaria como grupo cuya esencia quedó recogida en su único álbum A mulher gera o mundo (1997) y que hoy vemos en cada una de sus actuaciones. En este proceso de búsqueda consiguieron un estilo performático propio en el que la danza afro devino su seña identitaria más relevante. El cuerpo de las mujeres, primera razón que las apartaba de los tambores, se convirtió paradójicamente en su instrumento más emancipador.

Adriana Portela, maestrina de Didá

A pesar de los difíciles comienzos, Didá fue poco a poco tomando espacios en la ciudad y pronto empezaron a cosechar éxitos. Su surgimiento abrió un camino importante en la percusión para las mujeres de Salvador y a su idea de grupo no mixto se fueron sumando otros proyectos, como Bolacha Maria (creado por Carlinhos Brown en el Candeal), As Meninas, Batom Lilás, Brincando de Eva, Arte de Saia, De Batom. Hoy en día son un referente a nivel internacional por su labor transformadora y guerrera. Su trabajo constante por romper las barreras y los estereotipos castrantes de género se ha traducido en una mejora de la vida de muchas mujeres en Salvador de Bahía y, desde en la distancia, también de las nuestras propias.

Carol O. C. (Carolina Fdz. Cordero)